Otra PedrojETAda (y II): Las entrevistas, a golpe de talonario

El líder indiscutible de la prensa amarilla de nuestro país (la cual él prefiere llamar "periodismo de investigación"), ha vuelto a quedar con el culo al aire en evidencia ante todos los lectores (y no-lectores) del panfletillo de derechas el InMundo . El hombre que creía ver furgonETAs Kangoo con pruebas indiscutibles de la autoría de ETA (discos de Mondragó y similares) en el atentado del 11M, ha sido capaz de pagar al terrorista Trashorras a cambio de mentir inpunemente, dando una nueva versión de los hechos (ya van 5 distintas), en aras de defender su maltrecha imagen.

Todo sea por salvaguardar a sus amistades del Partido Popular (que como se puede apreciar en la foto, su sombra protectora era buscada por él desde hace bastantes años). Es una de las ventajas del sensacionalismo unido a la falta de escrúpulos y la mínima ética deontológica: la libertad absoluta de mentir, manipular, extorsionar la realidad, negar la evidencia... con tal de defender a los suyos y aumentar las ventas.

Como siempre, habrá quien dude de mis palabras sobre este espinoso tema, así que aporto fuentes:

El ex minero procesado por el 11-M: "Mientras 'El Mundo' pague, yo les cuento la Guerra Civil"

El procesado, al juez: "Yo no sabía que iban a entregar sustancias explosivas"
Trashorras calca en su quinta versión de los hechos frases lanzadas por dirigentes del PP
Acebes se lamentó de que le hubieran ocultado una prueba que resultó inexistente
Una diputada nacional del PP habló como experta en química para desacreditar a los Tedax

"Mientras el periódico El Mundo pague, si yo estoy fuera, les cuento la Guerra Civil española". El ex minero José Emilio Su árez Trashorras, acusado de facilitar el explosivo con el que los terroristas del 11-M perpetraron el atentado más grave en la historia de España, se desahogaba así en la cárcel, en marzo de 2005, en una conversación con sus padres, a cuya transcripción ha tenido acceso EL PAÍS.

Sigue en El País ; También en Cadena Ser,

Sí, mis sagaces lectores, habéis leído bien: Ya va por su quinta versión. Coherencia, a este terrorista, le sobra (tanta como a su ilustrísimo entrevistador). Después del giro que ha tomado el asunto, el sentido común nos indica que la caverna seguirá los dictados de la decencia y rectificará. Sin embargo, no sólo no piden perdón por dar información totalmente falsa, sino que además se recreean en ese recurso que tanto usan,llamado victimismo. Ver para creer:

El País intenta desacreditar a El Mundo sobre el 11-M el mismo día que el PP lleva al Congreso las últimas revelaciones

[...]El titular de El País en su portada se supone que es un fragmento de una conversación entre el ex minero y confidente de la Policía Emilio Suárez Trashorras con sus padres en marzo de 2005. "Mientras El Mundo pague, les cuento la Guerra Civil". Lo que ocultan José Manuel Romero y Ernesto Ekaizer en el diario de Prisa es el contexto en que se produce esa conversación.[...].

Fuente: Libertad Genital

Tanto nivel de sectarismo, sin embargo, no es de extrañar en el panfleto del ultraderechista LoSSantos. Recordemos que está asociado con PedroJeta, su amigo y defensor, de quien recibe como regalo a diario una columna en el InMundo en que verter su bilis contra el diabólico y satánico ZP (y por descontado, del malo, malísimo Polando). Por tanto, lo que diga Pedro-J se mueve en el campo de la verdad absoluta (la cual nos debe iluminar a todos a pesar de estar basada en testimonios fraudulentos); sin embargo, lo que dice El País, sólo "se supone" a pesar de que en este caso sí que haya pruebas (estos ggojos, de los que no se puede uno fiar).

A estas alturas de la marcha, incluso la publicación hermana (ideológicamente hablando) del InMundo, la revista Época, le ha abandonado. Hace pocos minutos recibo la noticia de que además se posicionan en su contra el ABC y Punto Radio. Oscuros tiempos para Pedro Rostro, en que incluso su amigo Ansón ha sido echado a la calle por su radicalismo y sectarismo.

El subdirector de Época desmonta la teoría conspirativa de El Mundo

Como un capítulo más de la batalla entre medios de comunicación de la derecha, Enrique de Diego, subdirector del semanario Época, publicará en Periodista Digital una serie de artículos donde presenta sus “tesis opuestas” a las expuestas en el diario El Mundo, sobre las teorías de la conspiración referidas a los atentados del 11-M. En la primera entrega desmonta los argumentos que Suárez Trashorras expuso en una reciente entrevista en El Mundo.

Fuente

Una vez llegados a este punto, su ejército personal "Los peones negros" (voluntarios que le hacen su trabajo sucio sin cobrar un duro euro) se ha quedado sin argumentos para sus correrías. Es más, su auténtico líder ha vuelto a quedar ante la opinión pública como lo que siempre ha sido: un burdo manipulador y mentiroso, a la caza de la noticia más sensacionalista que logre tanto aumentar sus ventas (bolsillo), como desestabilizar al gobierno socialista (de propina).

Esta misma semana el PP iba a elevar todas las conspiranoias PedroJetescas al Congreso. Y ante el evidente descalabro del teatro que habían preparado para amenizar a sus votantes, corretean como pollos sin cabeza. Ahora que hay que aceptar resposabilidaes, todos se desentienden y se intenta desviar la atención hacia otros temas (fórmula tan usada por el PP):

El PP exige la dimisión de Rubalcaba y Caldera por la inmigración ilegal
Caldera anuncia que en lo que va de año se ha expulsado de España a 59.000 inmigrantes ilegales
La inmigración ha sido el tema protagonista de la tensa sesión de control al Gobierno en el Senado. El PP ha exigido la dimisión de los ministros Jesús Caldera y Alfredo Pérez Rubalcaba por la gestión que sobre este tema está haciendo el Gobierno.

Fuente

Sin duda alguna, el gran arte de este hombre es el de perder a ojos de la sociedad toda su credibilidad (si es que le quedaba alguna a estas alturas), y aun así, seguir engañando a sus lectores y mantener sus cuotas de ventas. Lo hizo en el pasado, lo ha hecho hoy, y lo seguirá haciendo en el futuro. Toda una hazaña digna de admiración, que sólo los mejores representantes de la mentira pueden hacer realidad. Ni Goebbels lo hizo mejor.